
Entrevista a Ignacio Ramírez
Ignacio Ramírez nació en Buenos Aires, vivió durante su infancia entre Uruguay y Chile, antes de regresar a Argentina a la edad de 11 años.
Después de terminar la escuela secundaria y de formar parte de numerosos proyectos de bandas de rock tocando el bajo, comenzó su carrera musical estudiando la Licenciatura en Composición en la Universidad Católica Argentina (UCA). 3 años después, siguiendo a su pasión por las bandas sonoras de videojuegos y películas, decidió anotarse en su segunda carrera paralela, Tecnicatura en Producción Musical.
Se graduó de ambas carreras en mayo de 2017, y 3 meses después, se mudó a Valencia, España, para iniciar un Posgrado en Composición para Cine, TV y Videojuegos en Berklee Valencia, donde se graduó en julio de 2018.
Actualmente es Director de Audio en TGA (The Gaming Agency) donde desarrolló tanto la música como el diseño sonoro para los videojuegos móviles de distintas empresas como Nestlé, Telefónica y Usuaria.
También es miembro y cofundador de UpCraft Studios, habiendo trabajado en proyectos como Professional Single y Hello, My Shining Love (Series de Televisión), Open Doors (Documental), Ay Antonia (Cortometraje), música adicional en Burying Yasmeen (Película), y orquestación, arreglos y producción en Epochal, un próximo álbum épico orquestal, del pianista argentino Matias Bacoñsky.
CdA: ¿Cómo considerás que tu experiencia musical como intérprete interactúa con tu trabajo actual?
IR: Hay varios aspectos de mi experiencia como intérprete que pongo en práctica para mis proyectos de hoy en día. Sobre todo aquellos que requieren de una instrumentación de banda moderna. Uno de mis últimos proyectos fue el de componer música adicional para una Serie de TV China de Drama y Romance, las composiciones requirieron un uso frecuente de guitarra acústica, bajo eléctrico, batería y piano, que, gracias a mis conocimientos por experiencias pasadas, pude poner en práctica de manera eficaz.
CdA: ¿Qué es lo que más destacás de cada carrera que cursaste?
IR: La licenciatura en Composición Musical fue la carrera que mayor formación me brindó. Comenzando por un amplio conocimiento en el repertorio de Música académica (Desde el Barroco hasta el Contemporáneo), formación completa en teoría y práctica musical en campos importantes como Armonía, Composición y Orquestación, y además, un uso avanzado en el manejo de la orquesta, junto a un extenso espectro de técnicas extendidas usadas en varios aspectos como la música contemporánea y las bandas sonoras de películas de suspenso y de terror. La Tecnicatura en Producción Musical sirvió como un medio de canalización por el cual podía aprender a aplicar todos mis conocimientos previos, adquiridos en la Licenciatura en Composición, en la composición para bandas sonoras y lo que sería, el momento más importante de toda mi carrera académica, el posgrado en Música para Películas, TV y Videojuegos. Aquí no solamente aprendí a mejorar ampliamente la calidad y producción de mis composiciones, sino que también aprendí acerca del funcionamiento de la industria de la Composición de Música para Bandas Sonoras, distintos tipos de trabajo que dividen el área, métodos de entrega, a ser más eficaz y rápido a la hora de entregar los productos y, lo más importante de todo, me brindó una red de contactos sólida y amplia.
CdA: ¿Cómo es el proceso de trabajo para el armado de una banda sonora?
IR: Soy una persona que trabaja de forma sistemática e intuitivo a la hora de componer para bandas sonoras. Mientras más pienso y racionalizo una composición, peor me sale, es un proceso exclusivamente natural. Cuando me brindan una imagen o referencia, la veo detenidamente, proceso mis sentimientos y luego intento relacionarla con alguna música o canción existente que me remita a aquella imagen; la tomo como influencia, y luego me siento en el piano y dejo que mi alma haga el trabajo en lugar de mi cabeza. Por lo general las mejores composiciones me han salido de adentro como una manera completamente natural de expresarme, es la forma que tiene mi cuerpo y espíritu de hablar y comunicarse con el mundo exterior. Por lo general comienzo creando una armonía para luego darle un sentido de pregunta y respuesta en cuanto a forma, y la melodía siempre va al final, es la mejor manera de cerrar una composición, como la frutilla del postre, es lo más cercano a palabras que hay, sin serlo.
CdA: Te especializás en Bandas Sonoras para Videojuegos, TV y Películas ¿qué es lo que más te gusta componer y qué diferencias hay en cada género?
IR: Lo que más me gusta hacer es trabajar en música para algún videojuego. Crecí con clásicos como Super Mario World y The Curse of Monkey Island, cuya música escucho bastante seguido y me sé casi de memoria. No es solamente una cuestión de género y estilo sino también el simple hecho de que la música para un videojuego no es lineal, es interactiva, y depende enteramente de las decisiones de un jugador. Aquello es todo un desafío para cualquier compositor, pero los procesos de composición para algo interactivo terminan con resultados muy entretenidos y satisfactorios. El tipo de videojuego determina completamente el género musical que el proyecto necesita, y para eso hay tanto reglas como libertades, siempre y cuando sea algo llevado a cabo con criterio y prudencia. Hay casos específicos que funcionan como excepción, como el de Gustavo Santaolalla en la banda sonora de The Last of Us, nunca nadie se hubiera imaginado que una banda sonora sostenida por instrumentos como la guitarra criolla y el ronroco hubiesen funcionado de esa manera tan... especial y exquisita. No es algo que yo hubiese puesto en práctica, y eso también es prueba de que, a veces, ir en contra de las reglas musicales tiene sus frutos.
CdA: Contanos sobre el proyecto que más te gustó realizar y por qué.
IR: Este año he tenido varios proyectos por suerte, y muchos fueron muy divertidos de hacer. Principalmente, estuve y estoy trabajando para un nuevo canal de YouTube que subirá bandas sonoras de videojuegos clásicos en versión 8 bit. Los arreglos fueron bastante sencillos pero muy divertidos. Otro es el que mencioné anteriormente, una de las series titulada Professional Single, me llevó un tiempo de investigación previa a la composición, donde tuve que analizar el estilo y textura de las bandas sonoras que se utilizan frecuentemente en las Series de TV de ese estilo en China, y comparte varias semejanzas con las bandas sonoras de Animé. Crecí en la generación de Pokemón y fue muy divertido e interesante ver cómo plasmar mis recuerdos de nostalgia en ambos proyectos mencionados.
CdA: Contanos de tus proyectos a futuro.
IR: Mi próximo proyecto a ser lanzado en la brevedad se llama Epochal. Es un álbum de música épica orquestal, y fue creado en colaboración con el pianista argentino Matías Bacoñsky. Él compuso 10 canciones originales en el piano que necesitaban acompañamiento orquestal, las cual me encargué de componer y formé parte del proceso de arreglos y producción de las canciones, junto a un amigo y colega, David Stillman, quien se encargó principalmente de la mezcla y masterización del álbum entero. Hasta la fecha han sido publicados 3 singles llamados The Immortal, A Second Chance y A Light In The Horizon, todas disponibles en plataformas de reproducción como Spotify, Youtube, Amazon y iTunes. Hasta ahora The Immortal ha sido nominada para Mejor Canción Clásica Contemporánea/Instrumental en los Hollywood Music In Media Awards y ha ganado el premio a Mejor Canción en los Peace Song Awards del 2020. Forma parte de mi ápice como compositor hasta la fecha, donde me he superado por completo y he desarrollado un avanzado nivel de orquestación y composición. Estoy muy orgulloso de él.